QUERIDO CORAZÓN

 

Me encantas, me gusta tu grandeza y tu nobleza y admiro todas tus cicatrizas. Eres elástico ahora lo sé, porque hubo un tiempo en el que te encogiste asustado, pero después de las lagrimas te agrandaste de nuevo  y  nunca estuviste partido.

Aunque al principio si que pensé que de tanto no quererme te  había roto. Pero ahora: que te veo, que te siento y que te escucho…. He descubierto que eres de goma.

Tan blando como duro.

Es un orgullo para mí llevarte en el pecho y escuchar como lates, me gusta como me llenas de sangre y me repartes el oxigeno.

Te acuerdas como nos dolió, como nos dolió el pasado y como lo superamos. Como encontramos las respuesta a pesar de que nos mataban las preguntas.

Pero no curamos, y estamos aquí sintiendo, riendo, viviendo…

 Ahora tenemos nuestra recompensa,  nos han dado otra oportunidad, ahora además de vivir a solas la felicidad podemos compartirla.

Gracias querido corazón, sin ti  no hubiese podido